¿Qué rostro adoptaría la humanidad si, al amanecer, todas las creencias religiosas que han guiado su alma se desvanecieran como humo en el viento? ¿Cómo caminaríamos por la vida si los templos religiosos quedaran vacíos, los rezos enmudecieran, y el misterio del espíritu ya no encontrara nombre ni forma?