No, para nada. El estrés es una respuesta adaptativa. Así como los adultos nos estresan distintas situaciones, pues a los niños también. Aunque la reacción del niño pueda ser parecida (Por ejemplo, no querer ir a la escuela) no sé trata de lo mismo.
Quizá a los de nuestra generación nos criaron obviando mucho de eso y subestimando lo que nos pasaba, lamentablemente.
Ädëüs!
