Genial, me gusta debatir sobre temas polémicos. Y eso es aún mejor en familia, en donde hay plena confianza para expresar tu opinión. Al menos en una familia sana.
Creo que hay que romper con eso de "nunca hablar de x temas en una cena familiar", porque en realidad depende mucho de la madurez de la familia. A mí me gusta hablar de política por ejemplo, con fundamento.